Mitos de América


El fuego

Las noches eran de hielo y los dioses  se habían llevado el fuego. El frío cortaba la carne y las palabras de los hombres. Ellos suplicaban, tiritando, con voz rota; y los dioses se hacían los sordos. Una vez les devolvieron el fuego. Los hombres danzaron de alegría y alzaron cánticos de gratitud. Pero pronto los dioses enviaron lluvia y granizo y apagaron las hogueras.
Los dioses hablaron y exigieron: para merecer el fuego, los hombres debían abrirse el pecho con el puñal de obsidiana y entregar su corazón. Los indios quichés ofrecieron la sangre de sus prisioneros y se salvaron del
frío. Los cakchiqueles no aceptaron el precio. Los cakchiqueles, primos de los quichés y también herederos de los mayas, se deslizaron con pies de pluma a través del humo y robaron el fuego y lo escondieron en las cuevas de sus montañas.



Los mosquitos 

Muchos eran los muertos en el pueblo de los nookta. En cada muerto había un agujero por donde le habían robado la sangre.
El asesino, un niño que mataba desde antes de aprender a caminar, recibió su sentencia riendo a las carcajadas. Lo atravesaron las lanzas y él, riendo, se las desprendió del cuerpo como espinas.
—Yo les enseñaré a matarme —dijo el niño.
Indicó a sus verdugos que armaran una gran fogata y que lo arrojaran
adentro. Sus cenizas se esparcieron por los aires, ansiosas de daño, y así se echaron a  volar los primeros mosquitos.



La yuca 

Ningún hombre la había tocado, pero un niño creció en el vientre de la hija del jefe.
Lo llamaron Mani. Pocos días después de nacer, ya corría y conversaba. Desde los más remotos rincones de la selva, venían a conocer al prodigioso Mani. No sufrió ninguna enfermedad, pero al cumplir un año dijo: «Me voy a morir»; y murió.
Pasó un tiempito y una planta jamás vista brotó en la sepultura de Mani, que la madre regaba cada mañana. La planta  creció, floreció, dio frutos. Los pájaros que la picoteaban andaban luego a los tumbos por el aire, aleteando en espirales locas y cantando como nunca.
Un día la tierra se abrió donde Mani yacía. El jefe hundió la mano y arrancó una raíz grande y carnosa. La ralló con una piedra, hizo una pasta, la exprimió y al amor del fuego coció pan para todos.
Nombraron mani oca a esa raíz, «casa de Mani», y mandioca es el nombre que tiene la yuca en la cuenca amazónica y otros lugares.


Extraídos de Memorias del fuego-Los nacimientos de Eduardo Galeano
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17 comentarios:

  1. Bueno...me gustaron las leyendas,la de la mandioca más. Ya que estoy muy familiarizado con las comidas tradicionales y no viene mal saber algo más. Una pregunta nomás: ¿los nootka no son de de esta zona no? ¿no son de norteamérica?

    Ibañez ;)

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  2. Están muy buenos todos, aunque me gustó mas El Fuego.
    Me dí cuenta de que todos hablan o tienen una relación con el fuego, no se si tiene que ver eso con América.
    Yo no soy de leer mitos pero me gustaron.

    Marchetti, Giuliano.

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  3. La verdad todos estan lindos,el del mosquito me hizo reir, jaja... muy interesante como se las ingeniaban para explicar los fenomenos que no tenian explicacion en ese entonces...

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  4. bueno... en realidad no me gustaron, pero no estos tres,sino que a mi no me gustan los mitos. Los veo muy fantasiosos, aunque se que tienen que ser así ya que tenia que explicar cosas que para entonces no le encontraban explicación. Igual no tengo problema de leerlo...
    SALUDOS

    JUAN IGNACIO PAPALÍA

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  5. Opino lo mismo q juani... no me gustan ya q son muy fantasiosos...

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  6. bueno... a mi no me gusto mucho ninguno de estos 3 mitos, pero no porque los mitos no me gustan , sino porque no me llamo la atención para nada, igual supongo que hay diferentes versiones que algunas las hacen "mas interesante" y otras "menos interesantes" ... bueno chau besoss!! :)

    DENISE CRISTINO!

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  7. Bueno los mitos no me gustaron ya que no me parecieron interesantes, ya que los dos primeros mitos tienen alguna relacion con el fuego y el último trata sobre como surge la mandioca(esa es la ideologia de los mitos, el como surge cada cosa)

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  8. Bueno, para ser sincera no me gusto ninguno. . me llamo un poco la atencion el de los mosquitos nada mas.
    Saludosss .

    Agustina Bre Gerzel.

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  9. Este comentario ha sido eliminado por el autor.

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  10. Hola ! bueno la verdad que lei los dos primeros y no los entendi y tampoco me llamaron la atencion , no me parece interesante . El unico que entendi y me parecio interesante fue el de la mandioca .
    Bueno besossss.

    Agostina Nieto -

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  11. Este comentario ha sido eliminado por el autor.

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  12. Bueno, no me llamaron mucho la atención el del fuego y el de la mandioca, a pesar de que me gustan los mitos. El del origen de los mosquitos, en cambio, me pareció más interesante.
    Saludos.

    Ludmila Schmidt

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  13. Me gusto el mito de los mosquitos, pero los demás no tanto. Prefiero la mitología griega.
    Espindola

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  14. me gustaron los 3 mitos lo unico que me parecio medio satanico el de los mosquitos pero bueno jajaja :) muy buenos los mitos

    Martin Rodriguez Ponisio

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  15. Los tres me gustaron (aunque el del fuego no lo entendí mucho).
    Y, concuerdo con la mayoría, el de los mosquitos me pareció más interesante (aunque algo sádico el que sea un bebé el asesino).

    Atte. Nicole Lemos.

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  16. No se si ya vale la pena comentar. Màs vale tarde pero seguro.
    Aunque no me gusten las cosas fantasiosas, estos mitos me parecieron interesantes.
    Estàn buenos los tres, ya que son de distintos puntos de Amèrica, y explican distintas costumbres. Me gusto màs el de los mosquitos, y me gustaria saber a què època remonta su existencia.

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